En estos últimos tiempo China ha estado en el ojo del huracán a consecuencia del coronavirus.
Cuando ésta epidemia estaba en su fase embrionaria asistimos atónitos al confinamiento de la localidad de Wugan en el centro de China.
Nos parecía insólito y hasta exagerado las medidas adoptadas en China, contemplar esas imágenes de la policía entrando en las casas y llevándose a la fuerza a los posibles positivos.
Era finales de Enero del 2020.
Luego llegaron las admiraciones por la capacidad de trabajo que demostró la población china al ser capaces de construir un hospital para 1000 pacientes en tan solo 10 días, en una superficie de 34.000 metros cuadrados.
Eran principios de Febrero del 2020.
En estas fechas, ya nos advertían que Europa debía prepararse para la propagación inevitable al continente europeo. Nos lo dijeron los mismos chinos, la propia OMS o eminencias, como el Doctor Cumares.
Poco a poco asistimos a la llegada del Covid-19 en Europa sin que pareciera que las autoridades españolas hicieran nada, minimizando al virus, pidiendo tranquilidad y transmitiendo el mensaje que los síntomas y tratamientos eran semejantes a una gripe. También nos decían, que no atendiéramos a las noticias alarmistas ni a los bulos que corrían como la pólvora por las redes sociales.
El prestigioso epidemiólogo Fernando Simón, llegó a afirmar en rueda de prensa que estuviéramos tranquilos que dudaba que en España tuviéramos ningún infectado, y dudaba que, ni tan sólo hubiera, a lo sumo, 1 infectado local.
Era finales de Febrero del 2020.
La guinda del pastel llegó el 8 de Marzo con las manifestaciones celebradas con motivo del Día de la Mujer. Fué el caldo de cultivo idóneo para un Covid que tenía muy mala leche, junto con otras imprudencias, como permitir mítines con oradores que ya eran portadores del virus y mostraron públicamente sus síntomas sin pudor alguno, o como no hacer las pruebas a futbolistas y otros seguidores que llegaban desde Milán, o cerrar el estadio del Mestalla en Valencia, pero en cambio, permitir a todos los hinchas que estuvieran apretujados fuera del estadio.
A partir de aquí, todo se desencadenó muy rápido, los contagios y las muertes no paraban de subir, y finalmente, el 14 de Marzo del 2020, se decretó el Estado de alarma en España.
A día de hoy, yo llevo 45 días de cuarentena, y en España hay unos 207.634 contagiados y más de 23.190 muertos, a los que faltan sumar, los fallecidos en residencias y en sus domicilios, lo que supondrá un 40 % más de fallecidos. Sólo en el mes de Abril, el Gobierno ha dejado de pagar: 8.377 pensiones por jubilación. Tragedia.
Asistimos a la conversión de IFEMA en un hospital provisional asemejado a un hospital militar, una construcción elogiable de militares y profesionales voluntarios. También hemos asistido tristes, como el Palacio de hielo de Madrid se ha convertido en una Morgue.
Por fin hemos llegado al pico tan ansiado, después de llegar a la barbarie de más de 900 muertes diarias, y la situación hospitalaria que ha sido insostenible durante semanas, parece que empieza a ser manejable. No obstante, no veo luz al final del túnel.
¿Por qué escribo éste Post?
Muy simple. Alejada totalmente de las teorías que culpan a China de la creación del virus (más bien, si su origen está en un laboratorio, me decantaría por el continente norteamericano para acabar con China, pero esa es mi opinión), quería acercados un poquito a la población china desde mi experiencia.
Aunque ésta semana, he podido escuchar una entrevista del ilustre Dr. Luis Enjuanes, que lleva más de 25 años en el prestigioso Instituto Pasteur de París, el cual ha descartado totalmente su origen en un laboratorio.
Así que voy a contarte algunas cosas que me han llamado la atención en los 3 viajes que he hecho a China.
COMO VIAJAR A CHINA
Visado.- Primero de todo, has de saber que es obligatorio tener visado para poder viajar a China.
Pasaporte.- En relación al pasaporte ha de tener una vigencia de 6 meses antes de su caducidad.
Moneda.-La moneda es el yen, y yo hacía un cálculo rápido de dividir por 8.
Si vas al sur de China, en concreto a Shenzhen, tienes visados especiales de 3 días porque en ésta ciudad, se concentra un buen número de los negocios e industria a nivel mundial, y han ideado estos visados cortos, suficientes para ir a trabajar.
Vuelos.- Puedes llegar con vuelo directo con escala a mitad de camino desde todos los aeropuertos internacionales. Hay unas 11 horas y media de vuelo, a las que tienes que sumar las horas que haces en escala si escoges ese tipo de vuelo.
Yo siempre he viajado al sur de china con vuelo destino a Hong Kong, y a partir de dicha ciudad, he accedido a Shenzhen.
Inmigración.- Lo primero que te vas a encontrar en inmigration China, es un control súper exhaustivo. Prepárate a pasar, mínimo 1 hora si todo sale bien.
No sólo a nivel de papeleo, sino que además, es obligatorio pasar por varias máquinas de lectura de retina y de temperatura.
Todos estos aparatos que ahora vemos en las noticias y que se irán implantando poco a poco en España, en China hace años que ya lo controlan y los usan.
La verdad, tengo que decir que la primera vez que me puse en uno de los aparatos que te «escanea» de cuerpo entero, me dio mucha impresión y te da la sensación que te ven desnuda.
En relación al papeleo, en el primer control habrás de presentar un un papel rellenado que suelen darte en el avión.
Sino, allí tendrás ejemplares para rellenarlos, pero llévalo preparado, y que no sea que te chupes toda la cola y cuando llega tu turno te digan: «vaya a esa ventanilla y coja un papelito, rellénelo, y vuelva a hacer la cola» (porque te hace una gracia que te pase esto con el jet lag a cuestas…)
Tienes que saber que los visados de 3 días, te los pueden tramitar en el momento. Simplemente te habrás de dirigirte a la zona de visados, y hacer el papeleo, pagar y listos. Otra trámite hecho.
Seguramente tendrás que tragarte otra enorme cola, donde al final te hacen mostrar el «yellow paper”. Si no lo llevas, te harán retroceder de nuevo, ir a por el papel y volver a tragarte la cola para mostrar el papel amarillo.
Una vez pasado éste control, verás una enorme cola y al llegar al final nos hacen retroceder para introducir las huellas dactilares en una máquina. Y vuelta a hacer la enorme cola.
No es broma toda ésta burocracia. Y después de más de 1 hora con mucha suerte, y cargados como mulas, POR FIN PASAMOS CHINA-INMIGRACIÓN.
En serio que son súper estrictos y muy rectos, si alguien no les cuadra por temperatura, papeles o criterios subjetivos… pues que no entras en China, y Punto !!!
POBLACIÓN CHINA
La población china, en su ambiente, es simpática, curiosa, ruidosa y están llenos de costumbres o manías. Y son inmensamente trabajadores.
Comen rápido y haciendo mucho ruido, sorben la sopa y los fideos de una manera que te hacen sonrojar.
A mí me crean una gran curiosidad, y no puedo evitar que me inspiren admiración, ternura, y ganas de achucharlos.
Odian el sol, les gusta la piel muy blanca, ya que la oscura, es símbolo de pobreza y de ser campesino. Por eso suelen llevar sombrillas para taparse del sol mientras pasean.
Son unos grandes anfitriones, se desviven por que te sientas a gusto, te sirven té en todo momento y te colman de obsequios.
Son estrambóticos en el vestir, y las combinaciones más extrañas en la ropa, se las he visto a ellos. Hay combinaciones que luego han sido tendencia, como las deportivas con falda y vestidos.
Son muy respetuosos, incluso cuando están enfermos, por eso, una de las cosas que llamaba más la atención cuando viajabas al extremo oriente China, Hong Kong o Taiwán, es el uso habitual de las mascarillas.
Las usan por la polución, pero también las usan cuando ellos están enfermos, para no contagiar a los demás, en señal de respeto suelen utilizar mascarillas.
Al principio me llamaba mucho la atención, incluso observar tiendas donde las vendían de estampados o de colores.
Quien me iba a decir, que en el 2020, formaría parte de nuestro día a día. No sólo en España, sino en el mundo entero.
O fácil que en la habitación de tu hotel, te encuentres semejante artilugio contra incendios.
Otra cosa que me llamó mucho la atención, fueron los enormes edificios, parecen colmenas, atiborrados de minúsculos pisos de 30-40 metros cuadrados.
Sólo pienso ahora, que si nosotros nos quejamos de estar en nuestras confortables casas, ¿qué ocurre con ellos que viven en esos mini pisos? ¿como debieron pasar la cuarentena?
Porque además son obedientes y seguro que el % de infracciones por saltarse el confinamiento, debieron ser muy escasas. Allí la Policía no se va con tonterías. No puedo ni imaginármelo.
Os dejo una muestra de los edificios, aunque las fotos no les hacen justicia a ese bello enjambre de ladrillo y aluminio.
Y otras casas más bajitas con rejas en sus terrazas que parecían jaulas donde estuvieran encerrados. Que yu-yu daban éstas casas.
LA COMIDA DEL SUR DE CHINA
Primero de todo, espero que en los locales que elijas, esté escrito también en inglés, sino tendrás un problema de «interpretación».
En algunos locales no estará escrito en inglés, pero habrá fotografías. Aunque las cosas que puedas ver … esa es otra cuestión. Abajo, el famoso «pepino de mar chino» considerado una delicatessen en la comida china, es una de las cosas más raras que he probado. No sabría definirlo … Me gusta probar cosas allá donde viajo, pero con éste en concreto, su apariencia me impidió disfrutarlo como seguro se merece.
La llamada comida cantonesa (sur de China), es una comida de sabores fuertes y salados. Sus influencias, llegan hasta Hong Kong y uno de sus platos más conocidos internacionalmente, es el pato laqueado.
Cocinado lentamente colgado de un pincho y untado en una melaza, su piel queda crujiente y dulce. Al servirlo, quitan con cuidado la piel, que es considerada un manjar, y te trocean en trocitos la carne del pato. Te traerán unas tortas de base de arroz, tipo crepe, y una salsa con base de judía dulce que está para morir. Además cebolleta china y pepino cortado en juliana.
Pondrás un poquito de cada cosa en una tortita, lo enrollarás y a disfrutar !!
Con las menudencias que quedan entre los huesos, los pasan por la paella, y te lo sirven junto a hojas de ensalada iceberg, para que los rellenes de la carne y te lo tomes como un rollizo. Y enjoy !!
Los chinos comen mucho y muy rápido, y les encanta comer muy variado, así que no te sorprenda cuando veas que piden muchos platos. ¡¡ Es como si nosotros tapeáramos !!
Platos que debes probar sin duda, los arroces fritos, son buenísimos en cualquiera de sus variedades. Son más salados de los que solemos probar en los restaurantes chinos de aquí, nada que ver los sabores.
Las ensaladas de verduras, también buenísimas, cocinadas al dente, una delicia las judías verdes chinas y la raíz de loto … un manjar.
Otro manjares que debes probar son los DIM SUM (bocado que llega al corazón). También son originarios del sur de China, de Cantón, cerquita de Hong Kong, aunque en la actualidad, se ha extendido por toda la República y ha llegado a Japón, donde se conocen como gyozas.
Existe gran variedad de dim sum, los cuales pueden ser, dulces o salados, cocinados al vapor, hervidos o fritos, presentados cerrados, semi abiertos, en dumpling, en forma de empanadilla y varias variaciones más con nombres imposibles de recordar.
La pasta envolvente también puede variar, ya que pueden ser de trigo, masa de arroz o de tapioca. Los de arroz y al vapor y rellenos de gambas, son mis preferidos.
Y ya, si nos vamos al relleno, puedes encontrar rellenos de vegetales, de cerdo, combinados, de gambas … o por ejemplo, estos que ves aquí abajo en la vaporera, son mis preferidos, y se llaman «Xiaolongbao», y con ellos me gastaron una broma, ya que no me dijeron su relleno especial, y lo estaban de caldo y carne !!! Evidentemente, me cayó por todo el cuello… pero al segundo bocado, no se me escapó ni una gota, y creo que es la variedad de Dimsum más rica que he probado !!!
Si te gusta el té, aprovecha a probar la grandísima variedad de tés que tienen. Si visitas a alguno de ellos, lo primero que hacen es traerte un tetera llena de té, normalmente de jazmín que es el que suelen beber como agua por lo suave y dulce que és. Sólo sentarte en los restaurantes, también te traerán una tetera. Y también en los puestos callejeros encontrarás un montón de tés interesantes.
Podrás encontrar en los supermercados las cosas más extrañas que puedas imaginarte. Como en bolsas, tipo bolsas de Cheetos, encontrarás, picos y crestas de gallo, alitas de pollo, insectos a modo snack, lenguas de pato, patas de pollo… etc
COSAS QUE NO TE DEBES PERDER EN TU VIAJE A CHINA
VISITAR UN MERCADO LOCAL
Desde luego, visitar un mercado local. Es una experiencia que no debes perderte sin duda.
Éste mercado local lo encontré siguiendo a una viejecita con la bolsa de la compra. Sabía que iba a la compra diaria, y voilà !! Allí estaba !!
Sus olores y costumbres te van a cautivar. Asia es caótica de por sí, pero si algo les diferencia es su prioridad por el material fresco. Así que la compra suele ser diaria y compran lo que van a consumir al día.
De modo que verás que cada día las verduras están recién cortadas, desde los edamame, la soja fresca, las setas enoji, shïtake, las diferentes verduras que ponen en sus sopas. Un espectáculo de color.
Verás como están agrupados por productos, las verduras, la carne, el pesacado… Encontrarás huevos de varias clases, la pasta y los fideos de arroz recién hechos, listos para hervirlos y tenerlos listos, en apenas 3 minutos .
Y si algo llama la atención, es el pescado, que debe venderse siempre vivo según su tradición. Y allí lo tienes, en peceras, o cubos… Pero en muchos restaurantes te pasará igual. Así que no te extrañe tener que elegir que el pez que más te guste para comerte. Y la carne… pensaba que olería fatal como me pasó en Marruecos que me dieron hasta arcadas… pues no… aquí me llevé una sorpresa.
DESAYUNAR UNA SOPA
Desde luego que te lo aconsejo. Y siguiendo el dicho de «Allá donde fueres, haz lo que vieres». Refrán que desde luego aplico a la comida. Eso lo tengo clarísimo. Así que pronto me acostumbré a desayunar sopa con algas, dumplings y verduras. No me extraña que la mayoría de ellos estén tan delgados y tengan una vida tan longeva.
HACERTE UN MASAJE
Como en toda Asia, los masajes, es algo que no te debes perder. Allí son baratísimos y hay cientos de locales.
Tienes muchas opciones para elegir, sólo de pies, hasta la rodilla, hombros, cuerpo entero… En Asia, me hago uno cada día, pero es que hay locales que pagas 5 € por 1/2 de masaje de pies.
En Shenzhen, éste señor, se empeñó en hacerme la pedicura y casi muero cuando vi los artilugios que me sacó.
Y hasta aquí ha llegado el Post. Espero haberte entretenido un poco en ésta cuarentena, y haberte acercado un poquito a la gente china. No pierdas la oportunidad de visitar éste atrayente país, te va a sorprender a casa paso,
THE END